La alianza entre Argentina e Israel, plasmada por medio de la firma del Memorando por la Democracia y la Libertad, documento que incluye el traslado de la embajada desde Herzliya (al norte de Tel Aviv) a Jerusalén en 2026. no solo causó revuelo diplomático sino que también encendió las alarmas en materia de Inteligencia.
En el programa «Comunistas», emitido por Bravo TV, el conductor Juan di Natale y los periodistas e intelectuales que lo acompañan en la mesa pusieron el foco en la falta de transparencia del gobierno de Javier Milei, tachando de mantener un «peligroso hermetismo» sobre el asunto y sugiriendo que el pacto podría estar relacionado con el fortalecimiento de las redes de espionaje, especialmente a través de alianzas con agencias internacionales como el Mossad, servicio secreto hebreo.
Cecilia Degl’Innocenti, politóloga e internacionalista, comenzó su intervención resaltando lo que a su entender es una «no noticia», expresión del vacío informativo que existe sobre el acuerdo. La periodista explicó que, más allá del hermetismo oficial, el asunto genera inquietudes sobre lo que realmente se está negociando entre ambos países.
Por otro lado, el diputado nacional Gabriel Solano, invitado al programa, fue categórico al cuestionar la legalidad del traslado de la embajada. «Esto es una provocación», aseguró, refiriéndose a la decisión que no pasaría previamente por el Congreso, maniobra que no solo es controversial en términos diplomáticos sino también jurídicos.
Sin embargo, el punto que más preocupó a la mesa fue un aspecto señalado por Solano: el riesgo de que Argentina se vea envuelta en un «peligroso juego de espionaje». «Este es un gobierno muy obsesionado con el espionaje interno», observó, refiriéndose a las conexiones entre el gobierno de Milei y las agencias de inteligencia internacionales, especialmente el Mossad. A su juicio, la alianza con Israel podría poner en peligro la soberanía del país ya que, como recordó, “nadie hace espionaje interno mejor que el Mossad”.
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Sabina Frederic, exministra de Seguridad, también se sumó a la crítica. En un análisis más profundo sobre los intereses detrás del acuerdo, destacó la falta de beneficios tangibles para Argentina. “No hay inversiones ni apoyos claros por parte de Israel. Lo que hay es una serie de compromisos ideológicos y geopolíticos que no solo son peligrosos, sino que podrían tener implicancias sobre la seguridad interna del país”, alertó.
LB / FPT