Pablo Grillo, reportero gráfico, está en grave estado luego de recibir el impacto de una cápsula de gas lacrimógeno disparada por la Policía durante la represión de la protesta de jubilados en el Congreso. Sufrió pérdida de masa encefálica y pelea por su vida en el Hospital Ramos Mejía.
La brutal escena quedó registrada en video. En las imágenes, captadas por el periodista Emanuel Coria de FM La Tribu, se ve el momento exacto en que Grillo, mientras realizaba su trabajo, cae tras el impacto. “Los gases venían desde el cordón policial, los disparaban al aire y llegaban lejísimos. Para mí fue bastante adrede”, relató Coria en diálogo con Infobae en Vivo.
El ataque no terminó ahí. Según testigos, cuando un grupo de manifestantes intentaba auxiliar al fotógrafo, la policía continuó avanzando y reprimiendo. “Le salía mucha sangre y lo llevaron en andas. Lo más grave es que la policía siguió avanzando cuando estaba armada la ronda para asistirlo”, agregó Coria. Por la noche, su padre, Fabián Grillo, confirmó que Pablo estaba siendo operado y que su situación era crítica. “Él estaba trabajando de forma independiente”, aseguró.
Represión y violencia en las calles
Además del ataque a Grillo, la movilización dejó un saldo de 12 civiles heridos, más de 100 detenidos y daños materiales de gran magnitud. Un policía de la Ciudad fue alcanzado por una bala en el brazo y está internado en el Hospital Argerich, mientras que otros seis uniformados sufrieron heridas.
La protesta de jubilados se tornó violenta tras la presencia de grupos de barras, lo que derivó en una escalada de enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. La Policía de la Ciudad y efectivos federales respondieron con gases lacrimógenos, balas de goma y camiones hidrantes.
El secretario general de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, denunció la “brutal represión” y exigió la liberación de los detenidos, entre ellos el sindicalista Daniel Catalano, quien recuperó su libertad pasadas las 20.
Las imágenes de la jornada muestran un escenario de extrema violencia: patrulleros incendiados, contenedores en llamas, pedradas, baldosas arrancadas y destrozos en la zona. Según estimaciones del gobierno porteño, los costos de reparación ascienden a 275 millones de pesos.
Mientras el país debate sobre el uso de la fuerza en las manifestaciones, Pablo Grillo continúa luchando por su vida.
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por R.N.