La baja o quita de retenciones a las exportaciones agropecuarias era un reclamo unificado de todo el sector y el anuncio del Gobierno generó repercusiones positivas. Desde la Sociedad Rural Argentina (SRA) apoyaron “que se ponga al campo como prioridad y se lo reconozca como uno de los sectores que motoriza la economía del país”.
“Hace muchos años venimos solicitando la eliminación total de las retenciones y hemos acercado varios documentos y propuestas a las actuales autoridades nacionales y provinciales. Esta noticia sin dudas representará un alivio para los productores, pero seguiremos trabajando y buscando la eliminación total y definitiva de ese impuesto distorsivo”, indicaron desde la entidad presidida por Nicolás Pino.
Mientras tanto Carlos Castagnani, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), afirmó: “Valoramos estas medidas que buscan aliviar la carga de los productores y potenciar la competitividad del campo argentino. Reducir retenciones a la soja y eliminarlas para las economías regionales es un paso importante hacia un sistema más justo y eficiente. Estas decisiones demuestran que es posible avanzar en políticas que incentiven la producción y el desarrollo en nuestras regiones, motor esencial de la economía nacional”.
En la misma línea de Pino, Castagnani puso en el horizonte una posible eliminación definitiva del tributo para todos los productos. “Nos abre una ventana para consolidar este diálogo, en camino a lo que prometió el presidente que es la eliminación total de las retenciones. Esperemos que se pueda lograr lo antes posible”, destacó el dirigente.
En tanto, Andrea Sarnari, presidenta de Federación Agraria Argentina (FAA), dijo: “Lo más positivo de todo es que el Gobierno nacional ha escuchado a un sector que está crujiendo, para usar palabras de lo que nos pasa con el clima. Estamos complicados y no es un buen momento”.
Y Lucas Magnano, presidente de Coninagro, dijo que el anuncio “descomprime” una situación que venía extremadamente crítica para el productor. “Es una gran señal, una gran palmada en el hombro hacia la producción agropecuaria y hacia los productores. Esto es el inicio de un camino en el que no solo tendremos que continuar discutiendo la quita definitiva de las retenciones, sino también el resto de la presión tributaria de la Argentina”, aclaró.
Cabe recordar que los miembros de la Mesa de Enlace tienen agendada para los próximos días una reunión con el Ministro de Economía Luis Caputo.
Desde la esfera agroindustrial también se hizo oír el apoyo a la decisión oficial. Gustavo Idígoras, Presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), afirmó que la baja de retenciones “es un hecho sumamente positivo e importante”, aunque advirtió: “Tenemos que ver la letra chica y cómo se va a aplicar y qué tipo de compromisos o condiciones tiene dicho decreto. Vamos a esperar a ver los contenidos al mismo para ver cómo va a reaccionar el mercado, pero naturalmente siempre damos la bienvenida a cualquier baja de retenciones”.
Por su parte José Martins, presidente del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), dijo que “el alivio de la la presión fiscal es una medida excelente, necesaria para que la agroindustria libere toda su capacidad productiva generando ingresos de divisas, empleo y desarrollo para todos los argentinos”, y añadió: “Esperemos que la situación de equilibrio fiscal permita que lo que hoy es temporario sea permanente”.
Y desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) su presidente Miguel Simioni afirmó que “reducir la carga impositiva sobre el sector productivo no solo alienta la actividad económica, sino que también genera un gran impacto federal, dado que muchas de las producciones beneficiadas son clave para el desarrollo de economías regionales y la generación de empleo en todo el país”.
Representando la voz de los chacareros, Ronalt Garnier, presidente de la cooperativa agropecuaria La Paz, de Entre Ríos, explicó que el sector agropecuario venía muy comprometido con los precios internacionales de los cereales en baja. «Tenemos que competir con países sin retenciones, entonces es muy difícil. En Entre Ríos el 71 por ciento de la producción se hace en campos de terceros, este año no cerraban los números por ningún lado. Por eso, para el sector este anuncio es un incentivo importante y lo recibimos con entusiasmo. Hay que ver mañana cómo reaccionan los precios, especialmente de la soja que es el foco de la tormenta».