El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, respondió de manera pública a recientes declaraciones de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien había cuestionado la gestión económica actual y la evolución de la deuda pública.
En un extenso mensaje difundido a través de redes sociales, Quirno señaló a la exmandataria como responsable directa de políticas que, según sostuvo, derivaron en elevados niveles de inflación, pobreza y endeudamiento.
Entre sus principales afirmaciones, el funcionario criticó la ausencia de autocrítica por parte de Cristina Kirchner y acusó al kirchnerismo de sostener un enfoque que calificó como «chamanismo económico». Según Quirno, ese modelo generó restricciones a la inversión, déficits fiscales recurrentes y un aumento significativo en los compromisos financieros del Estado.
Críticas a la política económica del kirchnerismo
Quirno inició su respuesta haciendo alusión a la participación de la expresidenta en tres gobiernos nacionales, remarcando que, a su criterio, ese período fue determinante en la generación de desequilibrios económicos que aún persisten. También recordó la condena judicial de Fernández de Kirchner, vinculando su desempeño en la función pública con decisiones que, aseguró, tuvieron consecuencias económicas relevantes.
El secretario de Finanzas sostuvo que las políticas económicas aplicadas durante los gobiernos kirchneristas generaron un entorno poco propicio para la inversión. En ese sentido, cuestionó las restricciones a la libre circulación de capitales y remarcó que tales medidas «han hecho que Argentina no sea un lugar donde los inversores quieran invertir». Además, planteó que se violentó el principio básico de permitir a quienes invierten utilizar libremente sus recursos.
En su publicación, Quirno enumeró a los ministros de Economía que formaron parte de los distintos mandatos kirchneristas. Mencionó a Amado Boudou, Hernán Lorenzino, Axel Kicillof, Martín Guzmán, Silvina Batakis y Sergio Massa. A cada uno de ellos le atribuyó decisiones que, según expresó, contribuyeron a agravar la situación económica, incluyendo la reestructuración de deuda, la implementación de políticas fiscales expansivas y un uso intensivo de la emisión monetaria.
Uno de los ejes centrales del mensaje de Quirno fue la relación entre déficit fiscal, emisión monetaria y endeudamiento. «La deuda es siempre hija del déficit», afirmó, al tiempo que señaló que los gobiernos encabezados por Fernández de Kirchner incurrieron en desequilibrios financieros que no pudieron ser financiados por otras vías.
En cifras, Quirno aseguró que entre noviembre de 2019 y noviembre de 2023 el endeudamiento fue de 156.000 millones de dólares, y sostuvo que si se considera el período 2008-2015, el total se elevaría a más de 300.000 millones de dólares. También indicó que durante ese tiempo el Banco Central perdió reservas a cambio de títulos emitidos por el Tesoro.
Defensa del rumbo económico actual
En contraposición, Quirno defendió las políticas económicas implementadas desde diciembre de 2023 por el gobierno de Javier Milei. Señaló que se logró un superávit financiero inédito, que permitió evitar la toma de nueva deuda, refinanciar compromisos previos y reducir el stock total de deuda pública tanto en términos absolutos como en relación al Producto Bruto Interno (PBI).
Respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el funcionario sostuvo que fue clave para fortalecer el balance del Banco Central y reducir pasivos heredados. Según detalló, entre noviembre de 2023 y mayo de 2025 se produjo una reducción de deuda por 50.000 millones de dólares.
Quirno también rechazó la acusación de que el actual modelo esté generando un nuevo ciclo de endeudamiento. «No existe tal modelo de endeudamiento estructural», afirmó, y agregó que «todo lo contrario, hemos reducido deuda».
«Verá entonces que no existe tal modelo de endeudamiento estructural sino todo lo contrario toda vez que hemos reducido deuda. Pienso que el único modelo que usted conoce es el modelo de las Louis Vuitton que tiene (que ahora se confirma son producto de su condena por administración fraudulenta)», remarcó.
Inversiones y régimen RIGI
El funcionario defendió además el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), recientemente aprobado, como una herramienta clave para atraer inversiones privadas sin intervención estatal directa. Indicó que ya hay cuatro proyectos aprobados bajo ese régimen, con compromisos por 12.300 millones de dólares, y anticipó que existen otros en evaluación.
Según explicó, estas inversiones son realizadas tanto por empresas locales como extranjeras, sin participación directa del Estado. Contrastó este esquema con las políticas de obra pública durante las gestiones kirchneristas, a las que vinculó con prácticas de uso indebido de fondos públicos.
En paralelo a la publicación de Quirno, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, también se refirió a las declaraciones de la expresidenta. En una entrevista radial, Francos cuestionó la información utilizada por Fernández de Kirchner y sostuvo que «en prisión no debe recibir todos los números de la Argentina».
Según el funcionario, los indicadores económicos muestran una recuperación, incluyendo mejoras en el consumo y un crecimiento sostenido de la actividad mes a mes.
Reclamos y advertencias de Cristina Kirchner
Las declaraciones de Cristina Kirchner que motivaron las respuestas oficiales fueron publicadas a través de su cuenta en la red social X. En su mensaje, la exmandataria criticó la gestión financiera del Gobierno nacional, al advertir que «te quedás con guita que es de las provincias» y que «ni en dólares cierran los números».
Además, apuntó a la salida de divisas por parte del sector privado. Según sus datos, en mayo se transfirieron al exterior 3.226 millones de dólares, lo que representaría un récord desde 2003. Sumando las cifras de abril y mayo, estimó que en 45 días se habría fugado el 44% de los 12.000 millones de dólares que el FMI otorgó al país en abril.
El cruce entre funcionarios del Gobierno nacional y la expresidenta se produce en un contexto de tensiones políticas y económicas, mientras avanza el tratamiento legislativo de proyectos claves como la Ley Bases y el RIGI. La discusión sobre la herencia económica, la política de deuda, la emisión monetaria y las restricciones al capital continúa siendo uno de los ejes principales del debate público en Argentina.