La familia de Nahuel Gallo, el gendarme argentino que permanece secuestrado e incomunicado por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela desde hace dos semanas, pudo enviarle una carta. «Estamos haciendo todo lo posible para que pronto estés con nosotros”, le escribieron en el conmovedor mensaje.
El gendarme permanece incomunicado desde hace dos semanas, cuando fue retenido por el régimen venezolano en la frontea con Colombia. Pese a que viajaba a visitar a su familia y tenía toda la documentación correcta, lo acusaron de ser un espía infiltrado y, desde entonces, no se sabe nada sobre su paradero ni sobre su estado de salud.
A dos semanas de la desesperante situación, su madre Griselda Heredia pudo escribirle una carta en vísperas a la Navidad en la que le aseguró que están «haciendo todo lo posible» para que pronto recupere la libertad.
En la carta, escrita a mano y fechada este último sábado 21 de diciembre en San Fernando del Valle de Catamarca, la madre del gendarme también buscó tranquilizarlo al contarle que su familia se encontraba bien y que estaban agotando todas las vías para que recupere su libertad.
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«Querido hijo: te escribo esta carta para decirte que nosotros estamos bien. Estamos haciendo todo lo posible para que pronto estés con nosotros”, le escribió Griselda a Nahuel.
“Quiero que te quedes tranquilo, tu hijo Víctor y tu pareja están bien. Te mandamos fuerzas, sabes que te amamos y estamos haciendo todo lo imposible para que todo esto se solucione y pronto tenerte en casa”, agregó en la carta.
«Sabés que sos muy importante y te necesitamos fuerte ahora, más que nunca…Contamos las horas para verte y darte un fuerte abrazo. Hijo mío no está solo, tu familia te está bancando en toda esta situación. Te amamos mucho de parte de toda la familia, tus hermanos, tu abuelo, tu mujer y tu amiga Juli”, firma la carta.
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Si bien por el momento no se confirmó que Nahuel haya recibido el escrito, trascendió que el exembajador argentino en Caracas, Oscar Laborde, y el dirigente social Juan Grabois hicieron gestiones para que la carta se pueda enviar a Venezuela.
«Fue simplemente hacer llegar una carta que me arrimaron familiares del gendarme, concretamente la madre, a Venezuela. Esa fue la gestión. Una cuestión humanitaria. Ni más ni menos que eso», dijo Laborde a Ámbito.
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