La presentadora y actriz Silvia Pinal murió tras presentar complicaciones de salud derivadas de una infección en las vías urinarias, además de que sufrió el colapso de uno de sus pulmones mientras estaba hospitalizada en Médica Sur. Fuerza Informativa Azteca confirmó el fallecimiento.
La artista pasó sus últimos momentos rodeada de sus familiares, entre los que se encuentran Alejandra Guzmán, Sylvia Pasquel, Stephanie Salas, Luis Enrique Guzmán y Camila Valero, quienes se fueron reuniendo en el hospital. Horas antes, se informó que estaba recibiendo cuidados paliativos y se le habían dado los santos óleos.
Su amplia trayectoria será recordada por películas como como Viridiana (1961) —cinta que incluso protegió con su vida— y El ángel Exterminador (1962), además del icónico programa Mujer, casos de la vida real.
Silvia Pinal era una de las últimas divas del cine mexicano de la Época de Oro, su trabajo profesional también abarcó el teatro de comedia musical e incluso fue Senadora del Congreso de la Unión. La querida actriz nació el 12 de septiembre de 1931 en Heroica Guaymas, Sonora.
La actriz trabajó de cerca con el cineasta Luis Buñuel, concretamente en las producciones El Ángel Exterminador, Viridiana y Simón del desierto, de 1964.
Este deceso conmocionó tanto a sus familiares como los admiradores de su trayectoria, quienes expresaron sus condolencias en la caja de comentarios, recordando con cariño a la conductora de la famosa serie unitaria, Mujer, casos de la vida real.
Entre los Premios Ariel que obtuvo se encuentran Coactuación femenina, en 1953, por la película Un rincón cerca del cielo; Actriz en el año 1957, por la película Locura Pasional; actriz en 1958 por La dulce enemiga y el Ariel de Oro en 2008, por su trayectoria.
Durante una entrevista de 2019, La Diva del cine mexicano dejó muy clara su aparente última voluntad antes de fallecer, pues solicitó en broma que Luis Miguel cante en su funeral.
Esta información la otorgó durante la celebración por los 30 años del programa de radio Todo para la mujer, que conduce la periodista Maxine Woodside. “¡Órale nieto, no te arrugues!”, dijo sonriente la artista al recordar al padre de su bisnieta, Michelle Salas.
Sin embargo, inmediatamente se retractó de su declaración y remarcó: “No, no, no. Lo dije en broma, es un chico estupendo, es una gran figura, porque en mi familia todos somos estrellas”. Por el momento, no se sabe si esta voluntad póstuma de la actriz y conductora se respetará o si únicamente fue una broma del momento.
Por otro lado, desde ese momento reveló que ya tenía preparado su testamento para el momento de su partida, esto con el objetivo de evitarles problemas a sus hijos, entre los que figuran: Sylvia Pasquel, Viridiana Alatriste, Alejandra Guzmán y Luis Enrique Guzmán.
“Nos vamos a quedar con lo mismo todos… yo de testamentos no hablo con mis hijos, capaz que saliendo de aquí me ahorcan, no, no. Yo creo que algún pleito habrá, pero ya va a valer mad…es yo voy a estar viéndolos nada más”, reiteró en aquella entrevista.
A principios de 2023, Sylvia Pasquel reveló que probablemente Alejandra Guzmán será quien herede la casa de la actriz, pues ella es quien cuenta con los ingresos suficientes para mantener una vivienda de ese lujo.
Debido a su participación en películas y obras de teatro, Silvia Pinal fue considerada como la última Gran Diva del Cine de Oro en México, estas son algunas de las producciones en las que llegó a participar: El rey del barrio (1950), Un extraño en la escalera (1955), La Soldadera (1967), El Inocente (1956), Mi desconocida esposa (1958), Pecado mortal (1954).
Parte de su formación la cursó en el Colegio Pestalozzi de Cuernavaca y posteriormente en el Instituto Washington de la Ciudad de México.
Nacida en Guaymas, Sonora, en 1931, Silvia Pinal se consolidó como una institución en el mundo del espectáculo mexicano. Su relación con el actor y director Rafael Banquells le permitió un sólido aprendizaje en el teatro, lo que le otorgó popularidad en la capital mexicana. Esta experiencia fue crucial para su desarrollo profesional, llevándola a protagonizar una serie de películas que, aunque comerciales, fortalecieron su popularidad.
La carrera de Pinal no se limitó a México. Su participación en la obra maestra de Luis Buñuel, Viridiana (1961), le otorgó un importante reconocimiento en la cinematografía internacional. Cabe señalar que la actriz protegió con su vida esta cinta cuando iba a ser incendiada.
Además, su trabajo en películas españolas como Adiós, Mimí Pompón (1960) de Luis Marquina y Maribel y la extraña familia (1960) de José María Forqué, consolidó su presencia en el cine europeo.
La llegada de Silvia Pinal a España fue facilitada por el director argentino Tulio Demicheli, quien la había consagrado en México con varios melodramas eróticos. Esta colaboración internacional permitió a Pinal expandir su carrera y explorar nuevos horizontes en el cine.