El año comenzó con el entrenador Jürgen Klopp lamentándose porque Mohamed Salah se iba a jugar con el seleccionado egipcio la Copa de Naciones de África y no podía contar con él en Liverpool. Cuatro meses después, este sábado fueron protagonistas de una situación impensada por entonces, ya que el delantero discutió airadamente con el DT antes de ingresar al campo faltando 11 minutos en el partido que los Reds igualaron 2-2 en su visita a West Ham por la fecha 35 de la Premier League.
Con el juego 2-1 en favor de Liverpool, favorecido por una carambola en el área en un mal remate de Cody Gakpo que pegó en tres jugadores de los locales y se metió en el arco, Klopp llamó a Salah, a Darwin Núñez y a Trent Alexander-Arnold para hacer un triple cambio e intentar cerrar el partido. Pero justo cuando esperaban que el juego se detuviera para ingresar, West Ham empató con un gol del jamaiquino Michail Antonio, que cabeceó solo entre los dos centrales.
El gol de carambola de Liverpool
Ahí fue cuando Klopp exteriorizó su malestar por la distracción que le costó cara a su equipo, que con el triunfo estaba alcanzando a Arsenal en la punta, y dio unos pasos para darle una indicación a Salah. Allí estalló el conflicto. La posible arenga o pedido de salvación encontró al número 11 irritado. El egipcio, que no venía teniendo buenos partidos y quedó entre los suplentes, parecía reprocharle por lo poco que faltaba y comenzaron a tener un cruce de palabras. El atacante abría los brazos repetidamente como quien gesticula un “y qué querés que haga”.
El empate de West Ham que molestó a Klopp
En medio de la celebración de los jugadores de West Ham por la igualdad, el enojo de Salah se fue haciendo más visible junto a la línea y sus compañeros Núñez y Alexander-Arnold dieron un par de pasos adelante y se pusieron en el medio para aplacar los ánimos. El uruguayo, incluso, le bajó las manos y lo apartó, mientras Mohamed seguía quejándose de la determinación del entrenador que dejará el club al final de la temporada.
La discusión de Salah y Klopp
Finalmente, Liverpool no logró ganar el partido y perdió una gran posibilidad de llegar momentáneamente a la punta y se redujeron un poco sus chances de pelear por el título, ya que está a dos puntos de Arsenal, que tiene un partido menos, y uno por detrás del escolta Manchester City, con dos juegos pendientes.
Al salir del campo rumbo a los vestuarios tras el partido, Salah fue consultado sobre ese choque con Klopp y dejó sólo una frase: “Si hablo hoy, habrá fuego”. El regreso a casa para Liverpool es bajo máxima tensión.
El resumen de West Ham – Liverpool
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